Me desvelo aterrorizada por los murmullos.
No consigo conciliar el sueño.
Mis pesadillas mas ocultas, caen como las hojas en una tarde de otoño, una a una no dejan de atormentarme.
No se cuanto tiempo podre seguir combatiendo....
Paso las noches y los días encerrada despojada de libertad, bregando contra mi eterna locura.
Todo es lúgubre, no se si es de día o se hace la noche. Cuando he andado tanto, como la distancia me permite, detengo mis pasos.... y pregunto a mi alrededor:
¿por qué, si no tenia nada, y para no morir robe un trozo de pan?
No hay comentarios:
Publicar un comentario